Ultrasonido del cuello de la tiroides
La ecografía de cuello utiliza ondas sonoras de alta frecuencia para crear una imagen en vivo desde el interior del cuerpo del paciente. Es una prueba indolora que se utiliza hoy en día en el ámbito médico. Un ultrasonido también se refiere a veces como un sonograma, sonografía de diagnóstico, o la ultrasonografía. En ENT Center of Utah, todas las ecografías de cabeza y cuello son realizadas por nuestros cirujanos oncológicos.
Los exámenes de ultrasonido del cuello son indoloros y fácilmente tolerados por la mayoría de los pacientes. Puede haber una mínima molestia por la presión, ya que el transductor se presiona contra el área que se examina. Si el gel no se calienta antes del contacto con la piel, podría producir una sensación de frío.
Una vez finalizada la toma de imágenes, el gel transparente de los ultrasonidos se limpiará de su piel. Las partes que no se limpien se secarán rápidamente. El gel de ultrasonido del cuello no suele manchar ni decolorar la ropa.
En el caso de que se encuentren lesiones anormales durante la ecografía del cuello, el ultrasonido puede utilizarse para guiar una pequeña aguja de modo que se pueda obtener una biopsia puntual. Las biopsias guiadas por ecografía suelen permitir a los cirujanos obtener información diagnóstica importante sin tener que llevar a sus pacientes al quirófano para un procedimiento de biopsia abierta potencialmente innecesario.
Anatomía de la ecografía del cuello
Si nota algún síntoma, acuda a su médico de cabecera. También puede informar a su dentista sobre cualquier llaga, hinchazón o cambio de color en la boca, ya que está capacitado para buscar signos de cáncer de boca. El médico de cabecera o el dentista pueden realizar algunas pruebas generales y luego remitirte a un especialista.
Cuando te diagnostican un cáncer pueden ocurrir muchas cosas en un abrir y cerrar de ojos. La guía de los mejores cuidados para el cáncer de cabeza y cuello puede ayudarle a comprender lo que debe ocurrir. Le ayudará a saber qué preguntas debe hacer a los profesionales sanitarios para asegurarse de que recibe la mejor atención en cada paso.
Dependiendo de sus síntomas, el médico le examinará la boca, la garganta, la nariz, el cuello, los oídos y/o los ojos. Puede utilizar un depresor lingual para obtener una visión más clara de la boca y palpar el interior de la boca con un dedo enguantado. También le palparán suavemente ambos lados del cuello para comprobar los ganglios linfáticos.
En el caso de las zonas difíciles de ver, el médico puede utilizar un equipo especializado (endoscopia) o recomendar un procedimiento con anestesia (microlaringoscopia) que le permita examinar completamente la zona. También puede extraer una muestra de tejido (biopsia).
Qué muestra una ecografía de cuello
Las ecografías de cuello utilizan imágenes ecográficas para examinar los tejidos blandos de la región de la cabeza y el cuello. Pueden ser útiles para investigar las glándulas salivales, los ganglios linfáticos y el tiroides, así como lesiones, infecciones y heridas en los tejidos blandos del cuello.
No hay una preparación específica y puede comer y beber como desee antes y después del procedimiento. Se le pedirá que rellene un cuestionario sobre su estado de salud, medicación y cualquier alergia conocida. También se le pedirá que se ponga una bata y se quite algunas joyas para la exploración.
Se le pondrá cómodo en la mesa de exploración. Se le aplicará un gel en la zona que se va a explorar para ayudar a crear un buen contacto entre usted y la sonda de ultrasonidos. La sonda se colocará directamente sobre el gel y su piel mientras dure la exploración.
Su ecografía será realizada por un radiólogo (especialista médico) o un ecografista (tecnólogo especialmente formado). Como el examinador está interpretando imágenes en movimiento en una pantalla, se requiere un alto grado de concentración.
¿Por qué un médico pediría una ecografía del cuello
La ecografía carotídea permite detectar la obstrucción o el estrechamiento de las arterias carótidas, que pueden aumentar el riesgo de sufrir un ictus. Los resultados pueden ayudar al médico a determinar un tratamiento para reducir el riesgo de ictus.Productos y serviciosMostrar más productos de Mayo Clinic
El ictus isquémico se produce cuando un coágulo de sangre bloquea o estrecha una arteria que va al cerebro. Un coágulo de sangre suele formarse en arterias dañadas por la acumulación de placas (aterosclerosis). Puede producirse en la arteria carótida del cuello, así como en otras arterias.
Las arterias carótidas suelen estrecharse por la acumulación de placa, compuesta por grasa, colesterol, calcio y otras sustancias que circulan por el torrente sanguíneo. El diagnóstico y el tratamiento tempranos de una arteria carótida estrecha pueden reducir el riesgo de ictus.
Su médico le recomendará una ecografía carotídea si sufre ataques isquémicos transitorios (AIT) o ciertos tipos de ictus y puede recomendarle una ecografía carotídea si padece enfermedades que aumentan el riesgo de ictus, entre ellas:
Qué puede esperarCómo funcionaUn técnico (ecografista) realiza la prueba con un pequeño dispositivo manual llamado transductor. El transductor emite ondas sonoras y registra el eco cuando las ondas rebotan en los tejidos, órganos y células sanguíneas.